Utiliza tu dispensador solo con tus botellas Aguas do Paraño. No viertas café, té u otras bebidas en su interior. Y recuerda quitar el precinto de garantía antes de colocarla en el dispensador.
Te sorprenderá el poco espacio que necesita el dispensador en tu cocina. Apenas en solo una baldosa de 30×30 cm será suficiente para que disfrutes de todas sus ventajas.
Un trapo y un jabón suave serán suficientes para limpiar el exterior del dispensador. No utilices lejía o productos que contengan lejía o cloro.
Protege tus botellas del sol y no las expongas a cambios bruscos de luz o de temperatura
Por tu seguridad, siempre que vayas a limpiar el dispensador, desconéctalo de la red eléctrica.
Los dispensadores vienen equipados con una pequeña cuerda que permite fijarlos a la pared. De ese modo, al igual que ocurre con las estanterías, se evita que pueda vencerse hacia delante.
Periódicamente, quita el polvo que se pueda acumular en la parte posterior de la fuente. Para ello, basta un cepillo pequeño. Eso sí, no uses alambres rígidos o similares y hazlo siempre con la máquina desenchufada de la corriente.
Si has de mover el dispensador, no uses los grifos como elemento de sujeción. Pueden romperse y causar una fuga si se fuerzan.
No desmontes la fuente. Esta acción solo debería realizarla personal cualificado ya que existe riesgo de descargas eléctricas.
Para que los niños no se quemen, nuestros grifos rojos llevan un sistema de seguridad fácil de usar para los adultos pero no para los más pequeños. Si quieres bloquear ambos grifos, solicítanos un grifo azul de seguridad.
Vacía y limpia regularmente la cubeta que hay debajo de los grifos. Puedes fregarla a mano o incluso usar tu lavavajillas.
Recuerda que debes enchufar tu dispensador a la luz para activar el servicio frío de tu dispensador. Detrás de tu máquina encontrarás también un interruptor para encender, si lo deseas, el servicio caliente del grifo rojo.
Es conveniente que el dispensador no permanezca sin botella para que no le entre el polvo.
Vacía el dispensador por los grifos antes de retirarlo. Desenróscalos en sentido contrario a las agujas del reloj. Los puedes fregar con un estropajo suave o en el lavavajillas. Recuerda apagar el interruptor del grifo rojo antes de quitarlo.
Un trapo y un jabón suave serán suficientes para limpiar el exterior del dispensador. No utilices lejía o productos que contengan lejía o cloro.
Si el cable de alimentación del dispensador está dañado, avísanos. Recuerda que nuestros dispensadores tienen garantía total y que te lo cambiaremos sin coste alguno.
En la parte trasera encontrarás el tapón de desagüe. Coloca un cubo debajo y desenrosca el tapón para vaciar el dispensador.
Anualmente, Aguas do Paraño efectuará una limpieza interior de tu dispensador. Nuestro técnico especializado acudirá a tu domicilio para realizarla. Si no pudiéramos localizarte en tu domicilio, te dejaremos un kit de limpieza para que puedas llevarla a cabo tú mismo.
Según la estación del año o cómo prefieras beber, puedes regular el termostato de tu dispensador. Lo encontrarás en la parte trasera. Señala si prefieres beber a temperatura fría o más fría.
Recuerda que la temperatura del grifo rojo es de 90 grados por lo que resulta perfecta para preparar infusiones, un biberón o incluso cocinar.
Dependiendo de tu altura, cuando vayas a servirte un vaso o prepararte una infusión, no dobles tu espalda. Flexiona ligeramente las rodillas hacia delante para protegerla.
